Historias verídicas y algo que decir

Amo escuchar historias. Me encanta conversar, contar cosas y escuchar a los demás. Quizás la carrera de comunicadora si me queda ahahah. Procederé a realizar mi "entrada nocturna de inspiración súbita en horario que debería estar durmiendo" habitual.

Hoy supe de una amiga colombiana de quien no sabía nada hace un buen tiempo. Subió un journal a DeviantArt, una página tipo galería de arte que ella prácticamente ya había dejado de visitar, donde nos contaba de su vida y el por qué ya no estaba subiendo dibujos. Mi intención no es ventilar su vida más allá de lo que estipulaba subiendo ese journal por lo que seré breve y anónima: tiene un novio que la supera en inteligencia y cultura (lo que la tiene enormemente feliz por lo que puede llegar a aprender de él) [nadie quiere salir con un idiota.], se cambió a Economía (carrera que era su verdadera pasión) y está aprendiendo hebreo.

Hasta ahora, todo bien, se nota contenta, cómoda, satisfecha, con metas y objetivos en la vida, ¡cosa que me alegra un montón!, no hay como estar grata en el espacio más utilizado día a día: nosotros mismos.

Ahora bien, el motivo por el que escribo esto es por lo que ella expone a continuación: ya no sube dibujos porque no siente necesidad de plasmar sus sentimientos ni se le ocurren ideas que materializar, simplemente está algo ajena al rubro y con muchos quehaceres.

Personalmente tengo alma, corazón y la vocación de directora de arte. Me he pasado los últimos 4 años escuchando profesores poner acento en que "todos somos creativos", sin excluir a la gente de Marketing (el rubro de la publicidad está fuertemente divido entre los de Marketing [que se creen No creativos] y los Creativos [que se creen pésimos para matemáticas (?)]). Hoy, al leer eso, floreció en mí lo que esos profesores intentan expresar.

No nos separemos de nuestra creatividad innata, quizás hay gente que maneja mejor un pincel o ve más colores que tú, pero finalmente la capacidad de crear algo, de comenzar de cero, desde solucionar un problema en casa hasta decorar el cuarto, toda capacidad de resolver un conflicto podría ser creatividad. Por favor, no entendamos lo creativo ligado únicamente al arte, creatividad viene de crear, de solucionar. Y, por favor, no separemos el arte de nuestras vidas y emociones. Arte y creatividad no son sólo colores y lápices, la creatividad puede estar en los números, en las matemáticas, en las letras, en todo.
Ser creativos es ser inteligentes, ser creativos es más allá de lo que plasmas, es lo que piensas y lo que realizas. Ser creativos te permite saltar y hacer un cambio (que quizás nunca imaginaste).
Uff, ser creativos lo es todo, es la esencia de las acciones. Cuan importante es ser creativos...
la gente que limitó su creatividad repitiéndose a sí misma que no lo era, las personas que separan su vida de los lados emocionales que tiene ser creativos, esa masa de humanos puede estar condenando su vida a una rutina gris y una inteligencia limitada a un calendario, una voz más alta y más fuerte, un horario y, pero aún, a vivir con ellos mismos solitariamente. Ya que al irse, no habrán creado nada más allá de su labor institucional.

Cabe destacar que esta entrada no es (ni intenta ser) bajo ningún motivo una respuesta ni crítica hacia el journal de mi amiga, menos pronunciar que ella no lleva una vida creativa respetable (todo lo contrario). Sólo es una catarsis personal de lo que experimentó mi mente al leerla. Es más, le deseo mucha suerte en su vida a ella y a todos ustedes, amo ver personas satisfechas con lo que han decidido, amo ver vidas yendo hacia donde desean ir.


Hasta aquí lo dejo o caeré en cursilerías.


Desde aquí: Jamás dejen de ser creativos con sus vidas.